El francotirador

 

"Vernon Subutex" es una serie sobre el cambio, o sobre la incapacidad de adaptación al cambio . Y es buena, aunque va de más a menos... Romain Duris entrega una actuación fabulosa, de las que no son nada habituales. El resto del reparto también está a gran altura, sobresaliendo la enorme Juana Acosta. La música es excepcional, la dirección atinada y el guión correcto, exceptuando esos lisérgicos devaneos finales. La he disfrutado mucho.

Confieso que me acerqué a "Veneno" con poca esperanza, pero enseguida vi que era otra cosa. Los Javis han conseguido una serie que va muchísimo más allá que la figura que trata de recordar. Una ficción que habla de libertad individual, de derechos civiles y de lo desaprensivos que todos podemos llegar a ser. de una vida, de una época y de una sociedad. De nosotros, vamos... El reparto es irregular, pero consigue ponerse al servicio de la historia. Dirección y montaje juegan a favor del mensaje, y eso es mucho decir. El guión tiene puntos maravillosos y otros menos conseguidos, pero transmite. La cuestión principal es que esta serie ha cambiado conceptos y percepciones. Y eso no tiene vuelta atrás. Por eso es tan importante, porque no es solo una serie. Una gran alegría.

Para la crítica española es, creo, la serie del año. Para mí es muy buena, pero no me deshago en elogios como hacen otros. La ficción parte de un equipo de antidisturbios y su actividad, pero acaba convirtiéndose en una denuncia de la corrupción imperante. Marca Sorogoyen pues. El reparto es impresionante, de eso no hay duda. Me voy a quedar con Hovik Keuchkerian, pero podría ser casi cualquiera el más brillante. Personajes bien construidos, trama solvente y un guión muy rico, en definitiva, son sus armas principales. Pero, como su protagonista, trata de ganar a cualquier precio. Y ahí se pierde un poco. Dirección notable que llega a su culmen en ese plano secuencia del restaurante. Me sobra Villarejo, me falta racismo y me encanta que me cuente que los policías tienen vidas más allá de las porras. Ojalá más personajes así...

Michaela Coel dirige y protagoniza esta serie conn tinte autobiográficos y de denuncia social. El consentimiento en las relaciones sexuales abordado como nunca se ha hecho antes. Hay humor, hay un lenguaje cinematográfico muy moderno y provocación. La dirección es ágil y acertada, el reparto es irregular pero cumple y la fotografía es la adecuada a esa historia. El guión sustenta todo, valiente y actual. Te haces preguntas, te sorprendes y te das respuestas. Imprescindible.  

 

Empecemos por lo importante, es la serie que más me ha gustado en años... Hay tanta elegancia que satisface, hay tanta verdad que duele... Realmente cuenta un romance adolescente, pero lo hace de una manera tan íntima y cruda que se hace original. Lenny Abrahamson y Hettie Macdonald entregan una dirección tan reposada como brillante, que redondea un guión absolutamente genial. Daisy Edgar-Jones , muy especialmente, y Paul Mescal, elevan, con su interpretación, unos personajes maravillosos. La fotografía, el montaje... Todo. Una ficción que, en definitiva hace magia con lo cotidiano, con las dudas y las pasiones de una edad que lo cambia todo y que ninguno sabemos manejar. Ovación cerrada.